y el tamiz del reloj cohabita el corazón
del gorrión: Entre rama y aguja, la /palabra
menosprecia su nido, y la semilla,
mecida por confines aún más simples,
se niega a confesar.
Sólo el huevo gravita.
PAUL AUSTER, Poesía completa.Seix Barral, 2012. Pág. 5