lunes, 24 de octubre de 2011

EL RUIDO DE LAS RAMAS SE CONFUNDE


El ruido de las ramas se confunde
con el de la memoria.

Los mismo que estas hojas
heridas por un solo como el de agosto
hoy
cuando empieza noviembre
un cortejo de cuerpos y no cuerpos
días y no días
balian
y hermanos que aparecen en los sueños
como anuncio secreto de un tiempo
no vivido.

Para nada de todo lo que dije
- y que no tuvo nombre
porque no fue aprendido
con el ritmo punzante
y sosegado
con que mastica el alma -
tendrá sitio hoy aquí
donde un viento más fuerte
dispone el escenario de la contemplación.

Cae
como hueso mordido
lo que no tuvo fruto.

Una vida comienza.


Ada  Salas, Esto no es el silencio