viernes, 14 de octubre de 2011

PORQUE EL HOMBRE ES EL SUEÑO DE UNA CLARIDAD

...
porque el hombre es el sueño de una claridad.

Verso final del poema "Pronto será ya día" de Jaime Siles, en su libro Alegoría.

EL SOLITARIO


Una ciudad vacía
es una pesadilla apasionante igual que un rostro
sin persona detrás o máscara en desuso
porque calles y plazas y anuncios luminosos
y edificios y ruidos
son aspectos son signos que expresan la ciudad:
la auténtica colmena son los hombres.

Llega la noche urbana y poco a poco
desaparecen los últimos transeúntes
pero siguen ahí se oye su aliento
y el solitario puede entonces suprimir las fachadas
y ver sueños y anhelos y proyectos
y analizar las partes del retablo.

Todo cobra sentido: ropa tendida o flores
hablan de la rutina de tal o cual familia
de inmigrantes alegres en construcciones fúnebres
mientras el poderío del dinero
brilla en los centelleantes edificios metálicos
y el tedio hunde sus manos en el sueño
de los infortunados de los barrios-jardín.

Si se abre una cortina
o se atraviesa un lienzo de pared
pueden reconocerse las ventas aplazadas
en el abrazo de parejas sórdidas
y cuando los kilovatios dejan de gritar
aparecen los artículos del código civil
o reglamentaciones y fracasos
en cortinas y antenas: y los vicios y las normas
la historia entera y el futuro
de la ciudad están entre las páginas
del libro que angustiado deshoja el solitario.


José Agustín Goytisolo, Taller de arquitectura.